¿Te va mal en el amor? 7 razones por qué tus relaciones siempre fracasan

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Hay mujeres que aseguran que el amor no fue hecho a su medida, pues constantemente sufren decepciones, desilusiones y falta de compromiso de su pareja. En algunas ocasiones ni siquiera el padre de sus hijos ha sabido ejercer la paternidad, mucho menos mostrar apoyo o empatía hacia ella; pero tomar la actitud de víctima poco hará para solucionar ese problema. 
 
Es común que seamos incapaces de resolver ciertas dificultades de carácter, y en ocasiones la soberbia nos impide ver nuestros propios errores.
¿Has notado algún patrón de conducta a la hora de buscar pareja? Quizá el problema al que te enfrentas no es que “todos los hombres son iguales” o que “no naciste para el amor sino para cuidar a tus hijos”. Trata de ver más allá de los estereotipos que la sociedad ha impuesto y descubrirás que el verdadero problema viene desde adentro.
No se trata de culpar, sino de aceptar la realidad. Tal vez aún no identificas a la persona correcta para ti. Hoy te presento algunas fallas comunes en las parejas, tal vez encuentres las que te impiden ser feliz o construir una relación estable.
1. Buscas al mismo tipo de hombre 
Muchas veces es de forma inconsciente, pero algunas mujeres suelen buscar al mismo tipo de hombre. Aunque estén en relaciones diferentes, siempre terminan pensando que “todos son iguales” porque escogen a compañeros con carácter, actitudes, cualidades y defectos similares. Diversos expertos afirman que la manera de comportarse con la pareja responde al tipo de relación que tuvieron sus padres; muchos de estos patrones se repiten por las conductas aprendidas. Si la relación paterna fue conflictiva, es más probable que tome esa misma actitud y que repita ese aprendizaje dañino en su vida de pareja. 
 
Debes tener mayor consciencia de lo que buscas en un compañero, no es justo culpar siempre al otro por nuestras decisiones. Procura ver de manera objetiva cualidades y defectos de una persona antes de invitarla a formar parte de tu vida. Las señales son muy claras, deja de idealizar y comienza a analizar. 
 
2. No has sanado heridas del pasado
Los traumas de la infancia pueden llegar a marcar el comportamiento de una persona en la etapa adulta. Muchas mujeres tienen necesidad emocional de sanar la mala relación con su padre, y buscan hacerlo a través de la pareja. Pero evidentemente esto sólo acarrea problemas a la relación. Las mujeres que desconfían de su compañero (tanto como lo hicieron de sus padres) se vuelven obsesivas, desconfiadas y sofocan a la pareja.
 
Lo mejor para evitar malentendidos de este tipo en el hogar es sanar los problemas entre padre e hija, de lo contrario ese patrón destructivo te alejará de la persona que amas. 
3. Celos obsesivos
La desconfianza es una de las peores situaciones que puede sufrir una pareja; a raíz de ella surge una conducta obsesiva que llega a destruir la relación: los celos enfermizos. Este trastorno nace por la dependencia excesiva de una persona hacia otra; el apego es bueno y saludable, pero no a nivel extremo. Quien sufre celos obsesivos tiene comportamientos que vuelven la vida de la pareja un verdadero tormento. 
 
Viven con miedo a ser traicionadas, aunque no haya ninguna señal de ello. Presionan al otro con tal de conocer la verdad sobre la “aventura imaginaria” y lo acosan todo el tiempo. Viven angustiadas por sus propios delirios y no dejan vivir en paz a su pareja, la cual termina huyendo por el comportamiento obsesivo, que puede causar agresiones físicas y emocionales.
 
4. Te enfocas únicamente en tus hijos
Un error muy común de las madres primerizas es dedicarse enteramente a los hijos, olvidando su papel de mujer, esposa y profesional. Por supuesto que los niños son importantes: debemos educarlos, amarlos, estar al pendiente de sus necesidades y ponerles atención, para que crezcan como jóvenes independientes. Pero no es sano perderse en la maternidad, volverse esclava de los hijos y hacer a un lado a la pareja; tomen en cuenta que sin esta no existiría esa bendición tan grande en sus vidas. 
 
Dicen que los hijos son prioridad: antes que la madre, antes que el esposo, antes que ser mujer ¡Qué mentira tan terrible y dolorosa! Lo mejor es encontrar el equilibrio entre ambos aspectos, porque la pareja no sólo tiene necesidades y deseos físicos, también busca atención, amor, comprensión y todo aquello que lo hace sentir pleno y realizado como hombre. No olvides que tú, como mujer, también necesitas de tu pareja.  
 
5. No comparten los mismos valores, metas ni objetivos
Antes de elegir a la pareja es necesario plantear los objetivos individuales, evitar sacrificar su esencia como personas y partir de ciertos valores y deseos para que haya confianza mutua. Esta recomendación da la psicóloga Susana Zarco, pues uno de los pilares más importantes de una relación es el respeto; si no hay límites desde el inicio será muy complicado que la unión perdure. 
 
6. Te has olvidado de ser mujer
Hay mujeres que descuidan su aspecto y sus sueños, no ponen atención a los detalles de la relación y poco a poco deja de importarles su bienestar emocional y físico. ¿Cómo buscas el bienestar de tu familia si no estás en óptimas condiciones? 
 
Recuerda que ser mujer es una bendición, y antes de ser madre, esposa o amiga, eres una mujer hermosa, valiosa y capaz de lograr todo lo que te propones. Mírate en el espejo, arréglate y enamórate cada día de la persona que ves reflejada, porque cuando te olvidas de ti misma y te alejas de tu esencia, todo alrededor se derrumba, incluyendo tu relación.
 
7. Mala comunicación
La falta de comunicación con la pareja puede acabar fácilmente con tu relación. Es importante que cada uno plantee sus inquietudes y comente alternativamente lo que le molesta de la relación, siempre proponiendo soluciones. Cuando una de las partes hace más que la otra, llegan las frustraciones y el pilar que sostiene su relación se viene abajo.
 
Elegir a la pareja no es sencillo, hay cientos de aspectos por considerar, pero muchas veces el error está en nosotros y es nuestro deber cambiar esas conductas destructivas para lograr vivir en armonía y sacar la relación adelante.