Los Colores de Aura

Descubre el influjo del aura y sus colores en tu proceso de vida.

Actualmente coinciden científicos, metafísicos y esotéricos en aceptar la existencia de un campo energético en el cuerpo humano. Los impulsos eléctricos emanados del cerebro, viajan hacia el sistema nervioso por todas sus terminaciones y de éstas regresan al cerebro, originando un flujo de energía denominado Aura, que a su vez, se relaciona  profundamente con la luz y los colores del arcoíris. El aura y sus colores guardan una relación directa entre los estados físico, metal y espiritual del individuo. 

Como nos afecta el aura y sus colores en nuestro proceso vital.

En nuestro proceso de vida, todo aquello que nos sucede a diario se proyecta en forma de imágenes en nuestra aura, al tratarse de un campo electromagnético del cual estamos rodeados.

De esta manera, el aura y sus colores son el reflejo de nuestras vivencias, y es así, como su tono y dimensiones dependerán de nuestro estado emocional.

Que emociones se pueden apreciar al observar tu aura y sus colores con tu entorno.

Todos los seres humanos vivimos compartiendo nuestra energía con el mundo que nos rodea. Los alimentos que ingerimos, nuestros pensamientos, lo que vemos, oímos, tocamos, nos determina inconsciente o conscientemente. Parecerá un tema difícil de manejar, sin embargo, al consultar un especialista lograrás identificar cómo se manifiesta  tu aura y sus colores en tu estado físico.

Si se tiene un color azul índigo predominante en el aura, las características serán de  persona equilibrada, de hablar pausado, con vitalidad y buena salud, incluso con capacidades psíquicas. En el otro extremo, un aura de color gris, reflejará problemas mentales y físicos, pensamientos negativos y malas intenciones.

Dependiendo de la irradiación del aura, su color, su brillo e intensidad, el especialista o terapeuta sabrá si está en presencia de seres felices con estados mentales positivos o si se sienten deprimidos, irritados o con emociones negativas, ya que notará que la vibración de sus auras se atenúan disminuyendo la intensidad de sus colores. Por lo tanto el  aura y sus colores en tu actitud será determinante en la consulta.

Cómo puedes mejorar tu vida, equilibrando el aura y sus colores en tu estado emocional.

Todos los excesos en los que incurrimos al experimentar nuestro día a día afectan la vibración de nuestra aura. La alta ingesta de carnes rojas, la exposición al consumo constante de películas o programas de televisión violentos, los pensamientos y palabras negativas, todo esto repercute negativamente en tu aura y sus colores en tu estado mental.

Podemos entonces inferir, que somos lo que consumimos y atraemos. Quizás resulte difícil lograr un sano equilibrio, por ello es conveniente dejarse guiar por personas expertas que pueden orientarnos. La capacidad que han desarrollado para poder apreciar los colores del aura resultará en una enorme ayuda, logrando alinear nuestros centros energéticos.

Entre los colores del aura que pueden ser apreciados por un terapeuta están el violeta, rojo, naranja, amarillo, verde, rosado, blanco, dorado, café, negro, azul índigo y gris ya mencionados.

El aura y sus colores en tu estado espiritual, pueden reflejarle tu nivel de evolución, por ejemplo los tonos violetas, naranjas o dorados significarán un alto nivel de espiritualidad, intuición, y la capacidad de ser una gran guía.

Potenciar el aura y sus colores en el poder de atracción.

Dado que somos energía, el aura funciona como un sistema de atracción o repulsión, haciéndonos empáticos a personas afines energéticamente o alejándonos de personas con vibraciones negativas o incompatibles.

Alinear tu energía cobra un interés fundamental, por ello es tan necesario lograrlo de la mano de un terapeuta especializado. La concepción budista de que nuestra mente es la generadora de todo lo que experimentamos, nos hace intuir que una relación equilibrada del hombre y el mundo que lo rodea es posible. El estado de conciencia que desarrolles será el reflejo de tu aura y sus colores en tu proceso de vida.